Ya cerró Tower Records hace unos años, y ahora le tocó a Borders, que imagino sobrevivirá como librería virtual. Ayer el local de la 18 y L parecía una mesa de saldos (que por otro lado es lo que era). Otra razón para no volver a Washington.
Entre tanta desolación me llamó la atención la llamativa presencia de escritoras entre los títulos remanentes de ficción. Será que los hombres venden más, publican menos o envejecen mejor?
Por otra parte, Starbucks se esta pareciendo cada vez mas a una libreria, lleno de gente sentada en sillones leyendo un Kindle o viendo una pelicula en el iPad.
ResponderEliminarLo importante es que, aún contando el descuento de liquidación, conseguís el mismo libro más barato en Amazon. O sea, por algo Amazon "se lo llevó".
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